martes, 10 de septiembre de 2013

A todos se nos ha pasado por la cabeza en algún momento de nuestras vidas irnos a un territorio virgen a repoblar la especie


A todos se nos ha pasado por la cabeza en algún momento de nuestras vidas irnos a un territorio virgen a repoblar la especie. A empezar de cero una nueva vida haciendo uso del conocimiento del que disponemos o innovando. Se trataría de plantearnos como queremos que sea la descendencia que vamos a traer y que queremos para ellos, el conocimiento que les vamos a transmitir, si nos vamos a organizar en forma de sociedad tribal, consejo de ancianos, kibutz, federaciones, confederaciones, los valores a enseñar, las pautas a seguir, las normas, los acuerdos


Sobre todo sería interesante empezar desde la protohistoria. A ver si se volvia a repetir todo de la misma forma.


Pues bien, esa película existe y se llama "El bosque". El director Shyamalan le dió un uso político e ilustrativo de la sociedad rural tradicional. Como dicen en la opinión de otro blog:

 analiza los elementos de la película y la describe como <buen objeto de reflexión antropológica por hablar sobre la creación artificial de una comunidad humana, y sobre todos los elementos que supone esa tarea; la construcción de normas, valores, patrones de comportamiento, prohibiciones, rituales, mitologías, tabúes, memorias colectivas, etc. Se trata, pues, de un micro-universo social y de sus estrategias para mantener y perpetuar algunos valores considerados fundamentales para el “equilibrio” de ese agrupamiento social>

.y... tranquilo, si usted se plantea que podía tener algo afín con el anarquismo, no se preocupe porque no ha sido el primero. Bertrand Russell en "Historia de la filosofía occidental" y Foucault en "Saber y Verdad" ya se habían planteado las formas anarquistas en la Edad Media.

 

Para Russell, la sociedad rural tradicional era un motivo de infelicidad debido a la obediencia al marido, el analfabetismo, la ausencia de calzadas en pro de la incomunicación,  la religiosidad, el agradable rato en família del padre transmitiendo la cultura oral, la mujer haciendo punto de cruz y la hija mirando a las paredes.

Las ciudades industrializadas tampoco se salvaban de la quema de Russell. Su opinión sobre las ciudades industrializadas era poco más que un antro generador de mendicidad, donde se hacinaban en silencio personas que no encontraban una ocupación para su talento.

Para Foucault presentar la edad media como el mejor periodo de cualquier tiempo, era un absurdo histórico.


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