martes, 4 de junio de 2013

Urea Dorada.

Resulta paradójico plantearse como llegó el Partido Nacional Socialista Alemán al poder prometiendo de todo a todos, como si fuera Papá Noel. A los obreros se les promete expropiación de tierras y al capitalista se le promete protección frente a la expropiación, además de una sociedad sin huelgas.

Viendo el documental sobre Urea Dorada solo puedo decir que después de los inmigrantes van lesbianas, gays, transexuales y bisexuales. 

Basta con leer unos cuantos párrafos para comprobar la meméz delirante del nacional-socialismo. La ciencia de la todología magufológica:

" Aunque la prostitución no provocase la sífilis directamente, causaría un inmenso trastorno a nuestro pueblo, ya que los estragos morales causados por la degeneración bastan para exterminar a un pueblo lenta, pero inexorablemente.

Esta judaización de la vida de nuestras almas y la explotación mercantil de nuestros instintos sexuales harán perecer a nuestra descendencia tarde o temprano. 

El pecado contra la sangre y la raza es el pecado original de este mundo y el fin de la humanidad que sucumbe a él".

"El primer gran combate, de decisiva importancia para el destino del mundo, entre los valores de la raza tuvo lugar en suelo griego y decidió la victoria del principio de la pureza nórdica. Desde entonces, el hombre iba a comenzar su existencia por el lado del día y de la vida; las leyes de la luz y del cielo constituyen el espíritu y la esencia del padre".  

"Las madres son las guardianas de la vida familiar (en realidad está diciendo que son el descanso del guerrero y las paridoras de hijos para la patria), vivero de fuerzas capaces de conducir a nuestro imperio por las más altas cumbres. Sólo ella, la madre alemana, incorpora la idea de la nación alemana".

"El ario conquistador ha subyugado a las razas inferiores y se ha servido de su trabajo para sus propios fines, según su voluntad. Pero cuando las razas sometidas comenzaron a aprender la lengua y las costumbres de sus señores y desde que cayeron las barreras estrictas entre los señores y los esclavos, el ario al renunciar a la pureza de su sangre, perdió el paraíso".

 

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